Todo lo que obtienes sin hacer movimientos es veneno . Si comes y no te mueves, es veneno. Si lo tienes, sin dar nada, a cambio, es veneno. Si estás descansando sin trabajo, es veneno. Todo gratis-veneno.
El verdadero amor está libre de afecto por TI mismo, lo que significa que no intentas amarte a TI mismo a través de otras personas. El egoísmo es un intento de amarse a sí mismo con las manos equivocadas. Te quieres amar a cambio, y si no te quieres, no te quieres.
No hay secretos en la crianza de los hijos, diles qué hacer y diles qué no hacer. Hazlo hasta que maduren y requieran libertad. A continuación, puede pasar al Esquema "tú, yo, yo, tú".
¿Estás esperando a alguien y eso no está sucediendo? Supongo que aún no has hecho tu trabajo. Una vez que hagas lo que tengas que hacer, el mundo hará lo que tiene que hacer. Tú, yo, tú, tú, estas son las palabras que Dios le dice al hombre.
El deseo de una mujer de convertirse en un parásito es el atavismo de la debilidad y el deseo metafórico de volver a ser la costilla de un hombre. Tal deseo es puro suicida, porque destruirá su identidad. Este deseo es suicida y parcial, porque el parásito pierde sus habilidades de vida independiente y ya no es capaz de vivir fuera de su amo. Todo esto genera miedos eternos, conflictos y mentiras. El hombre desea que la mujer regrese en forma de una costilla, la mujer también desea una especie de espalda, pero la costilla no quiere, sino que quiere parasitar banalmente. Sin embargo, este deseo femenino está biológicamente justificado por el hecho de que los espermatozoides masculinos también, de hecho, hay un parásito, un cuerpo emocionante y el cerebro de una mujer.